jueves, 2 de abril de 2009

Ventanas romanas - Via del Banco de Santo Spiritu


Como despertando de un mal sueño. Como si volviese la luz, luego de semanas de oscuridad. Me levanto, luego de mis patéticas constataciones de los últimos días, con nuevos bríos. Como último eslabón, llegó la guinda de la torta. Se echó a perder el "calentador de agua eléctrico" (versión italiana de un calefont, una especie de termo gigante), y como si se tratara de maestros chasquilla chilenos, se demoraron 3 días en venir (según ellos "sabían" la solución de antemano) y así nos tuvieron duchándonos con agua fría, para luego cobrarnos 90 euros por el arreglo, pues el problema era otro.

Ahora bien, mientras yo pierdo mi tiempo en Roma, en Chile las farmacias son denunciadas por coludirse para estafarnos, Piñera propone un formato de circo romano para el arte y la cultura, la concertación hundida en su propio fango insiste en hacernos creer que Frei aprendió a hablar en público (y que ha rejuvenecido) ... Es hora de sacurdirse la modorra, comenzar a leer el mar de bibliografia pendiente que he acumulado, de terminar los articulos comprometidos, y de abrir las ventanas, dejar entrar aire fresco y salir a re-correr las callecitas de la ciudad eterna ... aprovechando la primavera.

2009

1 comentario:

F dijo...

Perder el tiempo es evidentemente relativo...